La Logística del Amor

Porque la logística no tiene nada que ver con el amor ¿o sí?

Todos los años en silencio nos preparamos para esperar el mejor regalo para el Día de San Valentín. Algunos/as admitimos estar emocionados/as, otros/as no, pero en el fondo… sí que nos gustaría recibir algo.

Todas las marcas se encargan no tan en silencio, de recordarnos que hay un millón de ofertas esperando ser compradas y destinadas a llegar a tiempo a las manos de alguien.

Por otro lado, estamos los operadores de distribución nacional e internacional, comenzando con el equipo comercial, que identifican a los clientes que entrarán en “peak season”. Ellos/as trasladan las necesidades al equipo operativo que dimensiona y prepara las unidades y al personal para abastecer esta alta demanda. Es una fecha donde se espera, como en los últimos años, que el volumen incremente en los días previos y el central, un 50% del flujo normal. ¡Qué viva el amor! 💘

Sin irnos muy lejos, Colombia, con la industria de las flores, exporta aproximadamente 1 millón de cajas sólo hacia Estados Unidos para el 14 de febrero y la cadena más grande de courier a nivel mundial se prepara triplicando sus vuelos para abastecer esta demanda.

Nuestra misión es llegar a tiempo, porque nadie quiere que su regalo llegue un día después de la fecha. Esos días se trabaja en horario extendido, y cada uno de nuestros couriers se compromete a tener la van vacía al final de su ruta. Sin dejar de lado, el que cada uno de los paquetes haya llegado en perfecto estado.

También es un reto para las áreas de CX que soportan cualquier consulta o reclamo que pueda aparecer mientras hacemos que todo suceda. Así que yo diría:  la logística es sumamente relevante para el día de San Valentín.

Porque el amor – dicen –  llega cuando tiene que llegar, pero el regalo por el día de San Valentín no puede llegar tarde.¡Qué ironía